Comunicado de Prensa
Lunes 29 de marzo de 2010
La novedosa intervención artística inaugurada la semana pasada dentro del ciclo “Austrocedrus, Arte Contemporáneo a Cielo Abierto”, tuvo una corta vida ya que fue retirada sin explicaciones del Paseo de las Colectividades. Todo indicaría que hubo robo o vandalismo de la obra.
“Una Furia”, la propuesta artística del tucumano Rodrigo Cañás, que se inauguró el martes pasado, implicó para el artista recorrer la ciudad de Bariloche recolectando basura. Fue la segunda obra expuesta en el Paseo de las Colectividades en el marco del Proyecto Austrocedrus. “Cañás se sorprendió al ver que era una ciudad limpia. Fue entonces que el Secretario de Medio Ambiente del municipio, Ing. Pablo de Brito, nos facilitó el acceso al basural y nos contactó con la Asociación de Recicladores de Bariloche. El arte, de la mano de Cañás, se metía de lleno en la caries de nuestra ciudad”, destacó Ruth Viegener, integrante del equipo organizador del ciclo de arte.
Durante su charla inaugural del 23 de marzo en el Hotel Nahuel Huapi uno de los asistentes le preguntó a Cañás si se imaginaba que iba a suceder con su instalación. Su respuesta indicó que debía evolucionar libremente. Imaginaba que pese a que todas las flores estaban muy bien atadas, el viento podía desprender alguna y hacerla rodar. Otra posibilidad era que la gente tirara “más flores”.
“Su propuesta debía durar dos meses pero fue efímera, apenas cuatro días. Podemos pensar que la caries de los barilochenses es muy profunda y que traer basura del vertedero, trasmutarla en un arreglo floral y exponerla en pleno centro, tocó el nervio, igual que cuando se come dulce o se toma algo helado”, señaló Viegener.
La obra estuvo inspirada en flores nativas de la región y fue fabricada con bolsas de diferentes colores llenas de papeles y otros residuos. El lugar donde estaba ubicada, en el jardín al lado de los mástiles del Paseo de las Colectividas, está ahora vacío. Sin embargo, quedan “recuerdos•, ya que una tarjeta catálogo y un registro en video dan fe del hecho artístico.
“La eliminación era una de las posibilidades, pero la más remota ya que se trata de un proyecto avalado por muchas instituciones. Desde ese ángulo hubo un robo de una obra de arte. No sabemos la motivación de la desaparición que coincide con la Semana de la Memoria, pero si podemos decir que hubo en ese acto un juicio de valor”, agregó Viegener.
Viegener, además indicó que si bien todos comprenden que no es amable ver los desperdicios expuestos, “quizás sea tiempo de pensar en los miles de conciudadanos que conviven con la basura de todos, con los olores nauseabundos y el criadero natural de ratas”.
“’Una furia’ igual que el mito, sigue expresándose, aunque nos esforcemos en barrer nuestras miserias bajo la alfombra. Quizás sea tiempo de reflexionar en que todos tenemos algo que ver en este asunto”, concluyó Viegener.
La novedosa intervención artística inaugurada la semana pasada dentro del ciclo “Austrocedrus, Arte Contemporáneo a Cielo Abierto”, tuvo una corta vida ya que fue retirada sin explicaciones del Paseo de las Colectividades. Todo indicaría que hubo robo o vandalismo de la obra.
“Una Furia”, la propuesta artística del tucumano Rodrigo Cañás, que se inauguró el martes pasado, implicó para el artista recorrer la ciudad de Bariloche recolectando basura. Fue la segunda obra expuesta en el Paseo de las Colectividades en el marco del Proyecto Austrocedrus. “Cañás se sorprendió al ver que era una ciudad limpia. Fue entonces que el Secretario de Medio Ambiente del municipio, Ing. Pablo de Brito, nos facilitó el acceso al basural y nos contactó con la Asociación de Recicladores de Bariloche. El arte, de la mano de Cañás, se metía de lleno en la caries de nuestra ciudad”, destacó Ruth Viegener, integrante del equipo organizador del ciclo de arte.
Durante su charla inaugural del 23 de marzo en el Hotel Nahuel Huapi uno de los asistentes le preguntó a Cañás si se imaginaba que iba a suceder con su instalación. Su respuesta indicó que debía evolucionar libremente. Imaginaba que pese a que todas las flores estaban muy bien atadas, el viento podía desprender alguna y hacerla rodar. Otra posibilidad era que la gente tirara “más flores”.
“Su propuesta debía durar dos meses pero fue efímera, apenas cuatro días. Podemos pensar que la caries de los barilochenses es muy profunda y que traer basura del vertedero, trasmutarla en un arreglo floral y exponerla en pleno centro, tocó el nervio, igual que cuando se come dulce o se toma algo helado”, señaló Viegener.
La obra estuvo inspirada en flores nativas de la región y fue fabricada con bolsas de diferentes colores llenas de papeles y otros residuos. El lugar donde estaba ubicada, en el jardín al lado de los mástiles del Paseo de las Colectividas, está ahora vacío. Sin embargo, quedan “recuerdos•, ya que una tarjeta catálogo y un registro en video dan fe del hecho artístico.
“La eliminación era una de las posibilidades, pero la más remota ya que se trata de un proyecto avalado por muchas instituciones. Desde ese ángulo hubo un robo de una obra de arte. No sabemos la motivación de la desaparición que coincide con la Semana de la Memoria, pero si podemos decir que hubo en ese acto un juicio de valor”, agregó Viegener.
Viegener, además indicó que si bien todos comprenden que no es amable ver los desperdicios expuestos, “quizás sea tiempo de pensar en los miles de conciudadanos que conviven con la basura de todos, con los olores nauseabundos y el criadero natural de ratas”.
“’Una furia’ igual que el mito, sigue expresándose, aunque nos esforcemos en barrer nuestras miserias bajo la alfombra. Quizás sea tiempo de reflexionar en que todos tenemos algo que ver en este asunto”, concluyó Viegener.
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